La cuenca del río Manití es clave para la biodiversidad y la regulación climática global, pero enfrenta amenazas por la deforestación y la degradación de sus bosques. Más de 2,500 personas dependen directamente de sus recursos. El Proyecto Manití, parte del portafolio de la Alianza Empresarial por la Amazonía, liderada por USAID, el Gobierno de Canadá y Conservación Internacional Perú, en colaboración con Solidaridad y el Grupo Palmas, busca promover bionegocios sostenibles que permitan a las comunidades prosperar en equilibrio con la naturaleza.